Un nueva confusión del papel de nuestra profesión llega a los medios. Esta vez es el diario Perfil el que se refiere de manera despectiva a nuestra labor.
En el breve artículo titulado: Relaciones peligrosas (Argentina - 24/02/2008 - Perfil - Pág. 2/Cultura) el cronista hace referencia al "trágico accidente ocurrido el 23 de enero en San Ignacio, en el que perdieron la vida dos personas", y señala que éste hecho protagonizado por un típico relacionista de celebridades (de aquellos que llevan a famosos a los eventos) "puso en el tapete la actividad de los profesionales de las relaciones públicas y justifica una reflexión en esta columna sobre esta particular profesión."
Reproduzco algunos conceptos del artículo:
Las relaciones públicas se definen como el arte, técnica o profesión de promover los lazos entre organizaciones o individuos y el público, mientras que los agentes de prensa se encargan de promover a un individuo o a una organización procurando una publicidad favorable a través de su difusión en los distintos medios. El primero en usar la frase "relaciones públicas" fue el presidente de los Estados Unidos
Thomas Jefferson en un discurso en el Congreso en 1807, aunque su mención estaba enfocada más en su política que en la definición actualmente reconocida.
Dos películas analizaron la profesión, sus excesos y sus peligros: Días de vino y rosas, de Blake Edwards (1962), y La mentira maldita, dirigida por Alexander Mackendrick (1957).
Ambas películas relatan de manera sordida la vida de dos agentes de prensa. Por cierto, el periodista parece desconocer la evolución que nuestra profesión ha tenido desde mediados de los 60's. Hoy un relacionista público es mucho más que un "prensero" o que aquellos que se dedican a llevar "celebridades" a los eventos.
Un consultor en PR es hoy mucho más parecido a un cientista social que aplica sus conocimientos en las más diversas áreas de la comunicación empresaria: comunicación institucional; de crisis, de marketing; interna; etc. Mucho más que prensa...
Se impone una tarea muy importante en Argentina y seguramente en otros países de la región: dar a conocer nuestra tarea de una buena vez para que se entienda que no somos simples "prenseros" o "convocadores de celebridades", y que no nos pasamos el día con un vaso de whisky en la mano derecha...
5 comentarios:
Hola Federico! Recien hoy descubro tu blog (es hora de que al menos a los socios del consejo nos mandes un aviso...)
Referido al cine, tuvimos suerte que el cronista no vio la brillante "Gracias por Fumar".
Abrazo
Gustavo averbuj
Gracias por el comentario Gustavo. Si es cierto, a veces es mejor que los cronistas no vayan al cine. Un abrazo,
Federico, te envío un link no muy positivo acerca de la imagen de las relaciones públicas http://es.youtube.com/watch?v=E5-s5rCvfzE
Saludos.
Adriana: un poco fuerte el final, creo que es una buena forma de mostrar con humor la mala interpretación que a veces hace la gente de nuestra profesión. Saludos,
Publicar un comentario